¿Lujo es exceso de adornos o es un concepto asociado a la satisfacción sensorial de la persona que compra un objeto? ¿Y qué significa “lujo asequible”?
Aquí te damos algunas claves para responder esas preguntas.
Valor aportado
Como dice el especialista en consumos Jordi Montaña, “el lujo no lo marca el precio sino el valor que el producto aporta al comprador”. De modo que lujoso es algo que brinda una satisfacción y un nivel de confort fuera de lo común.
El lujo asequible, específicamente, corresponde a una categoría de productos que van desde los perfumes hasta el mobiliario.
Sus creadores los ofrecen a valores que están al alcance de toda persona que quiera llevar a su casa un objeto estéticamente impecable y funcionalmente inmejorable.
Son muchas las marcas famosas que ofrecen productos así. La mayoría de ellas son italianas, francesas e inglesas, aunque cada vez se suman otras de diversos países.
El lujo asequible también es conocido como “masstige”. Es un término formado por dos palabras: “massive” y “prestige”, es decir, “masivo” y “de prestigio”.
Entonces, un perfume masstige, por poner un caso, es aquel que se halla en un nivel intermedio entre el low cost y la exclusividad.
Un sillón de lujo asequible
El sillón Cies es un claro ejemplo de un objeto de mobiliario encuadrado en el lujo asequible.
Por su estética minimalista puede ubicarse en el jardín o la terraza. También en el interior de una casa o un apartamento. Una opción es situarlo en un rincón del salón junto a una lámpara importante o una gran planta. Otra idea para este sillón es llevarlo al dormitorio, como parte de un espacio de lectura.
En la producción del sillón Cies se ha usado aluminio para la estructura y en sus módulos blandos, textiles a elección de quien lo adquiere.
El aluminio, un metal noble, le brinda solidez y una duración extensa. Además, resiste muy bien si está al aire libre ya que soporta la corrosión que provocan la lluvia, el sol y los cambios de temperatura.